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Experta revela las desubicaciones más comunes en una entrevista laboral

Muchas veces los expertos en reclutamiento y selección se enfrentan a candidatos capaces en lo académico pero con grandes carencias de habilidades blandas o de inteligencia social.

Claudia Valdés, psicóloga laboral y coordinadora del área de Reclutamiento y Selección de Grupo Expro, afrima que muchas veces ocurre que algunas personas transgreden los límites de una entrevista laboral, y pese a tener la experiencia para un cargo son descartadas y pierden la opción.

“Es lamentable que, por su comportamiento, postulantes con las competencias y la experiencia apropiada para un puesto de trabajo sean desechados en los procesos de selección de personal”, explica.

En este contexto, Valdés recalca la importancia que tienen los reclutadores para realizar un filtro en este tipo de candidatos.

Desubicaciones y desinterés

La experta en reclutamiento cuenta que una de las desubicaciones en que caen los postulantes es piropear a la persona que realiza la entrevista laboral o invitarla a salir.

“Si un candidato le dice por ejemplo “qué guapa es usted. ¿Tiene algo que hacer después del trabajo?” a un seleccionador que recién conoce, es predecible que tendrá un comportamiento poco profesional en su puesto de trabajo, donde mezcle su vida personal y laboral”, sostiene Valdés.

Otro error que pocos pensarían es mostrar una actitud de poca preparación en la sala de espera.

“Algunos escuchan música con audífonos mientras aguardan su turno. Esto muestra estar poco enfocado en la entrevista y un escaso interés en el resultado de obtener el puesto de trabajo”, acota.

Sin embargo, estas actitudes dependen también del tipo de cargo al que se postula. Probablemente en un trabajo creativo, el hecho de estar escuchando música o meditando puede ser bien visto por el futuro jefe, quien busca una persona que recurra a instancias de calma o de desarrollo de la imaginación.

“Los candidatos alternativos tal vez sean apropiados para un puesto donde se pida creatividad, pero la mayoría de las compañías son más formales”, advierte Valdés.

Cuida la apariencia

Así como el lenguaje corporal comunica gran parte de nuestro mensaje, lo mismo sucede con lo que vestimos o usamos.

Valdés cuenta que a las entrevistas de trabajo llegan candidatos con gorro, short o pantalón de jeans, pelo desordenado o exceso de maquillaje.

“No se espera que quien postula a un cargo de operario de máquina asista con terno a una entrevista laboral porque no trabajará de esta manera, pero sí bien presentado con camisa y pantalón”, asegura.

La experta señala que, para los cargos de vendedor o ejecutivo, el código de vestimenta en el caso de los hombres es con traje y corbata, y en las mujeres con traje de dos piezas o un vestido formal.

En el fondo, para una entrevista laboral debes ir vestido como irías a trabajar en el cargo al que estás postulando.

Atención con las palabras que usas

Si bien es importante que generes cierta confianza en el entrevistador, también debes cuidar tu lenguaje en un contexto formal como lo es una entrevista laboral.

Por ejemplo, la especialista llama a evitar hablar recurrentemente de términos como “cachai”, “pega” para referirse al trabajo o empleo, o “lucas” cuando se pregunte por el sueldo.

Valdés recalca que cuando se postula a un cargo, es clave ser recordado por características positivas como puntualidad, cordialidad y competencias apropiadas y no como un candidato que no sabe ubicarse en un ambiente de trabajo.

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