¿Qué es el salario emocional y cómo usarlo para motivar a los trabajadores?
A pesar de que su nombre lleva la palabra «salario», el salario emocional va más allá de una compensación económica. Se trata de una forma de cubrir otras necesidades de los trabajadores.
Según los analistas de Sesametime, la felicitación por un trabajo bien hecho puede llegar a ser más efectiva que el tema económico. Aunque lo ideal es llegar a un equilibrio entre ambos salarios, el financiero y el emocional.
«El salario emocional recarga la pilas a los empleados. Impide que pierdan su motivación y dibuja sonrisas, borrando las caras más largas de la oficina», señalan.
Ejemplos de salario emocional
El salario emocional es la suma de todos los beneficios que la empresa otorga a sus empleados, aparte del sueldo. Algunos de ellos pueden ser:
- Flexibilidad horaria.
- Márgenes de las horas de entrada y salida.
- Autogestión del tiempo.
- Mayor autonomía para el trabajador.
- Simplificación del trabajo.
- Formación pagada por la empresa.
- Programa completo de prevención de riesgos laborales.
- Vacaciones y días libres o «días sandwich».
- Teletrabajo.
- Servicios acorde a las necesidades individuales (por ejemplo, guardería).
- Vales de comida o casino gratuito en la compañía.
- Entorno creativo que les inspire.
En general, son retribuciones no económicas que aumentan la calidad de vida de las personas y su satisfacción laboral. Ello, según los analistas, deriva en un mayor vínculo entre los empleados y la compañía.
Desde Sesametime aseguran que si las organizaciones no ponen énfasis en el salario emocional, el talento será lo primero que huya en cuanto encuentre una empresa se adapte a lo que está buscando.