Estrés post vacacional: cómo la actitud del jefe es clave para evitarlo
El retorno al trabajo después de las vacaciones no suele ser fácil. La persona debe pasar de un ritmo tranquilo a levantarse temprano y cumplir metas. Incluso, muchos sufren estrés post vacacional, el cual puede evitarse dependiendo la actitud que tome el jefe.
“Cuando llega el titular de un cargo, muchas veces los jefes desean que se recupere rápidamente el ritmo y se ponga al día el trabajo atrasado. Eso es un error, pues el trabajador llega más lento y desconcentrado, y al presionarlo lo estresa innecesariamente”, afirma Claudia Cubillos, psicóloga laboral de la empresa de recursos humanos GrupoExpro.
El estrés post vacacional es muy común ya que responde a la necesidad de adaptarse rápidamente a un nuevo contexto, donde, a diferencia de las vacaciones, hay muchos factores que escapan de control.
Entre los síntomas está el desánimo con el trabajo, angustia, sentirse abrumado, con tareas acumuladas, insomnio, lentitud y poca productividad.
Reducir la intensidad de estrés post vacacional es responsabilidad no solo del trabajador sino que también del jefe.
“El jefe debería ser comprensivo los primeros días y tener paciencia para que la persona se adapte paulatinamente al ritmo de trabajo, lo que puede tomar una o dos semanas”, explica la experta.
La especialista entrega varios consejos para prevenir el estrés luego del retorno de las vacaciones
- Toma unos días en casa: una buena forma de reorganizar la rutina y dedicar tiempo al ocio para volver descansado al trabajo es dejar los últimos días de vacaciones para relajarse en el hogar.
- Reúnete con quien quedó a cargo: es importante que al volver al trabajo se agende una reunión con quien hizo el reemplazo en los días de ausencia. De esta forma podrás conocer qué cosas quedaron pendientes, cuáles fueron resueltas y cuáles son urgentes.
- Haz una lista de tareas: escribir lo que quedó pendiente ordena mentalmente y eso ayuda a reducir la ansiedad.
- Evita la autoexigencia: sea realista con las tareas que se alcanzan a realizar a diario o semanalmente. Hay que evitar querer resolverlo todo el primer día.
- Primero lo urgente: será imposible leer y responder todos los mails en un día. Por eso es mejor priorizar las urgencias. Si no las hay, comenzar con las tareas más simples hasta llegar a las más difíciles, que requieren de mayor análisis y concentración.
La psicóloga de GrupoExpro concluye que es fundamental no ser absorbido por el trabajo, sino que mantener durante el año una vida laboral y personal. Conservar hobbies como hacer deportes, ir al cine, compartir en familia y dejar tiempo para el ocio, evitando irse del trabajo más allá del horario de jornada laboral, salvo en situaciones excepcionales.