Cuáles serán los desafíos de las empresas ante la Ley de Inclusión Laboral
Según datos de la Fundación Tacal, actualmente un 15% de la población mundial posee algún tipo de discapacidad.
A nivel nacional, de acuerdo a cifras del Fondo Nacional de Discapacidad, alrededor de dos millones de chilenos mayores de 18 años viven con algún tipo de discapacidad, de ellas un 57% se encuentra inactiva laborablemente.
Sin embargo, esta realidad está por cambiar ya que el proyecto de Ley de Inclusión Laboral fue aprobado por la Cámara de Diputados el pasado 21 de marzo, mismo día que se conmemoraba el Día Internacional del Síndrome de Down.
El proyecto, que pasa al último trámite legislativo, obliga a las organizaciones públicas y privadas, con 200 o más trabajadores, a destinar un 1% de los puestos a personas con discapacidad o que reciban pensión de invalidez.
Además, se prohibirá de manera explícita todo acto de discriminación que se traduzca en exclusiones basadas en motivos de discapacidad.
Una encuesta realizada por Adecco Chile a 9.000 trabajadores, mostró el 25% de ellos manifestó la necesidad de una cuota mayor, mientras que un 69% dijo estar de acuerdo con la ley.
En cuanto a los detractores, solo el 5% señaló estar en contra de una ley de inclusión y el 1% cree que debería ser menor la cuota.
Importancia de un cambio cultural
Si bien esta ley ha sido celebrada por las autoridades, aún surgen críticas sobre cómo se llevará a cabo. Un punto de debate ha sido la forma en que las empresas van a prestar apoyo a los trabajadores que cuenten con algún tipo de discapacidad.
Suyin Palma, directora de responsabilidad social y bienestar de Adecco Chile, explica que a pesar de que este marco regulatorio es un buen punto de partida para una sociedad más inclusiva e igualitaria, una cuota de reserva obligatoria no garantiza el éxito de la ley.
“Un sistema de cuotas es el inicio de un camino hacia una sociedad que ofrece las mismas oportunidades para todos los ciudadanos, pero insuficiente por sí solo. Que la ley regule el número de contrataciones no significa, en absoluto, un cambio cultural en el ADN de las empresas”, afirma la experta.
Una nueva infraestructura
Entendiendo la importancia de la colaboración entre empresas, Laborum, junto a Fundación Tacal, organizó un encuentro al que asistieron los representantes de compañías como Copec, BCI y Banco Santander.
En la ocasión se abordaron los próximos desafíos que deberán enfrentar las empresas ante la inminente aprobación de esta nueva ley. Entre ellas, una de las más importantes es la infraestructura para colaboradores con discapacidad: como rampas para sillas de ruedas, personal de recursos humanos especializado y aspectos regulatorios.
“Si bien hay mucho por qué trabajar en materia de inclusión, desde el mundo empresarial sí hay interés por crecer en materia de discapacidad”, asegura Néstor Milano, director ejecutivo de Laborum Chile, Panamá y Venezuela.
Para Milano el desafío principal pasa por generar una cultura inclusiva en el trabajo y la transformación completa se produce cuando las compañías adoptan e integran las nuevas regulaciones en su cultura interna.