Cómo revertir la baja participación laboral femenina en la industria TI
Mónica Retamal
Directora Ejecutiva Fundación Kodea
La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) instituyó en el año 2010 el Día Internacional de las Niñas en las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), conmemoración que se realiza la última semana de abril, para motivar a las jóvenes de todo el mundo a considerar la elección de carreras profesionales del área tecnológica y de esa forma reducir la brecha digital de género.
Nuestro país tiene una precaria participación laboral femenina en la industria TI que alcanza apenas el 4%, por tanto urge alentar a las niñas y jóvenes chilenas para que vean a la tecnología digital como una oportunidad real de desarrollo profesional y no sólo como una herramienta de comunicación y/o entretención.
Además, cabe señalar que en Chile las mujeres trabajan principalmente en el sector servicios, empleos que en muchos casos son con bajos sueldos, horarios extensivos y pocas posibilidades de desarrollo.
En cambio, las carreras tecnológicas tienen mayores ventajas, tales como mejor percepción social, remuneraciones altas y flexibilidad horaria.
Ya es hora de que los estereotipos de género pasen a la historia, como lo demuestra uno de los hallazgos de un estudio que analizó el desempeño de más de 200 niños de la V Región que realizaron la Hora del Código en octubre de 2016, siguiendo la campaña internacional en la que niños y niñas juegan, aprenden y crean tecnología durante una hora. El estudio confirma que no hay diferencias entre niños y niñas al momento de programar.
Estoy convencida de que las niñas y mujeres chilenas están listas para dar el salto e integrarse de manera exitosa a la revolución digital y con ello contribuir a transformar a Chile en un país en un productor de tecnología.
Para lograrlo es necesario tender más puentes entre el mundo público y privado en torno a la serie de iniciativas de empoderamiento, educación, emprendimiento en programación para jóvenes y niño
Si no tomamos medidas ahora, Chile y sus niñas se perderán la oportunidad de participar de los beneficios de la economía digital.