¿Se aburre mucho en el trabajo? Quizás no esté explotando sus verdaderos talentos
La distribución de las tareas y cargos según los talentos de cada empleado es uno de los factores más relevantes para el desempeño exitoso de una organización. No obstante, en la práctica, no es algo tan usual.
«Más del 70% de la población tiende a desarrollar actividades que no se relacionan con su talento, esto debido a presiones sociales, la búsqueda de reconocimiento, aceptación, o estrechez económica, básicamente mecanismos de sobrevivencia”, asegura Claudia Bueno, directora ejecutiva de 2Manage.
Según Bueno, estamos ante un alto porcentaje de personas que se dedican diariamente a tareas y funciones que se relacionan más con habilidades aprendidas que con su talento innato.
¿Cómo orientar los talentos dentro de la empresa?
La experta señala que una de las posibles soluciones es el método Benziger, el cual se basa en la neurociencia para explicar, desde un aspecto fisiológico, la forma de procesar información que tiene cada persona. Ello permite constatar el desarrollo de las competencias y diferenciarlas del talento innato.
Esta metodología se sustenta bajo la premisa de que la información que percibimos la procesamos en la corteza cerebral, donde existen cuatro sectores o modos de pensamiento:
- El frontal izquierdo que está orientado al análisis y resultados.
- El frontal derecho encargado de la parte creativa e innovadora.
- El basal izquierdo asociado a la capacidad de programar y generar metodologías
- El basal derecho relacionado a la comunicación y empatía.
Según los estudios de la Dra. Katherine Benziger (y por cuyo apellido la herramienta se llama así), nacemos con uno de estos sectores como preferente, el cual ofrece menos resistencia al procesamiento de la información. Estas son las habilidades innatas de la persona.
Además, a lo largo de nuestra experiencia de vida, podemos desarrollar dos modos auxiliares de pensamiento. Sin embargo, siempre habrá un modo de pensamiento débil de menor conexión. Por ello las actividades que requieren utilizarlo nos aburren, cansan y evitamos realizarlas.
¿Por qué es importante desarrollar los talentos de su capital humano?
Bueno señala que desempeñarse en actividades que no se relacionan con nuestro talento por un tiempo prolongado tiene un alto costo a nivel fisiológico y psicológico. Por ejemplo, el consumo de oxígeno cerebral aumenta hasta 100 veces más a la vez que disminuye en el resto del cuerpo.
«Por lo mismo, la decisión óptima para una empresa es distribuir sus tareas y acciones según los talentos de su equipo, pues mejora el rendimiento, la motivación y a la vez que se reducen los costos asociados al estrés, al desgaste físico y los errores humanos», puntualiza Bueno.