¿Escuchar música en el trabajo mejora la concentración?
¿El hecho de escuchar música mientras preparas una presentación o haces una tarea puede ayudarte a concentrarte en el trabajo?
Alexander Pantelyat, profesor asistente de neurología y uno de los fundadores y directores del Centro Johns Hopkins para la Música y Medicina, estudia la relación de la música con el lenguaje; y si la música de fondo puede ayudar o no a concentrarse en una tarea.
Historia del «Efecto Mozart»
Según consigna El Mercurio, un estudio que apareció en Nature en 1993 demostraba que escuchar una música específica puede afectar el desempeño de una tarea en el espacio, aunque las razones continúan poco claras.
La teoría recibió el nombre de Efecto Mozart porque los investigadores utilizaron la Sonata para dos pianos en Re mayor de Mozart en su estudio, el que involucró a 36 estudiantes.
Desde ahí, varios estudios consecutivos han indicado que la música de Mozart puede que tenga un pequeño efecto positivo a corto plazo en la habilidad para sacar conclusiones con respecto a objetos de pistas visuales limitadas.
El problema, señala el Dr. Pantelyat, es que no se ha demostrado que el Efecto Mozart tenga claros beneficios más allá de los 10 a15 minutos en que los sujetos en los estudios estuvieron involucrados en algunas tareas.
Relación con los gustos de música
Si te atrae un cierto tipo de música, tal como la clásica, es más probable que te concentres mejor mientras escuchas esa música en vez de un género que no te agrada.
«Si disfruta con el heavy metal , podría estar más enfocado cuando la oye», dice el Dr. Pantelyat, quien estudia cómo la música se puede utilizar como medicina y cómo habría que tratar a los músicos con enfermedades ocupacionales.
No obstante, también se ha demostrado que los sonidos fuertes y rápidos distraen bastante.
Las palabras distraen
Las distracciones aumentan cuando se escucha no solo música sino que canciones con palabras.
«Si agrega letras, está activando el área de Wernicke, donde se procesa el lenguaje, y otras partes del lóbulo temporal, y esto puede desviar su atención o posiblemente sobrecargar la capacidad atencional del cerebro.Imagine escuchar dos lenguajes al mismo tiempo mientras trabaja. Por supuesto que eso distrae», precisa.
Un sinnúmero de estudios ha indicado que la música puede iluminar varias partes distintas del cerebro. El Dr. Pantelyat explica que la música activa tantas partes, si no más, del cerebro al mismo tiempo que cualquier otra actividad.
Lo anterior incluye el núcleo accumbens, el llamado centro del placer; los núcleos caudados, los que están involucrados en la planificación del movimiento; y el plano temporal, el que está en el centro del área de Wernicke.
Los efectos serían individuales
El Dr. Pantelyat manifiesta que si se acepta que la música puede hacer que una persona se sienta feliz o triste, entonces se puede ver cómo puede influir en la atención.
No obstante, los efectos de escuchar música son sumamente individuales y se basan en la experiencia y el placer.
«Cuando trate de enfocarse escuche música que disfrute y que no tenga letra o confórmese con el ruido ambiental. Simplemente ponga el pie en el acelerador y evite cualquier otra narrativa progresiva en el cerebro», aconseja el especialista.