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¿Cómo salvarse de ser despedido durante una reestructuración?

Desaceleración en la economía, disminución en ventas y fusión de cargos son causas habituales de reestructuración y desvinculaciones de personal. Normalmente son decisiones estructurales de las compañías, pero quien trabaja en ellas puede dar algunos pasos para evitar ser despedido.

Según Verónica Bermedo, psicóloga laboral de la empresa de outsourcing y recursos humanos GrupoExpro, habitualmente las jefaturas o comisiones que analizan las desvinculaciones se rigen por el criterio de quiénes aportan valor a la organización al momento de decidir a quién despedir o no.

«Por supuesto, se quedan con los trabajadores que aportan más valor, ya sea en ventas o en productividad del trabajo”, explica.

Por tal motivo, cuando los rumores de despidos y reestructuración acechan, es importante tener un historial de comportamiento que favorezca la permanencia laboral.

¿Cómo salvarse?

Entre las actitudes que podrían salvarlo de ser despedido en una reestructuración empresarial, la psicóloga laboral destaca:

  1. Actuar con tranquilidad: Los rumores de reestructuración habitualmente provocan angustia en los trabajadores. Esto puede provocar distracción y merma en la productividad, precisamente en un momento en que hay que exhibir buenos resultados para evitar ser desvinculado. La psicóloga recomienda mantener la concentración y foco en el trabajo, y una actitud mental tranquila, para continuar con los procesos laborales normalmente y con productividad.
  2. Colaborar: Si existe confianza, sería aconsejable conversar con la jefatura para tener una retroalimentación de la situación. Además, se recomienda manifestar al jefe la intención de colaborar con la empresa para la salir de la crisis. Por ejemplo, si bajan las ventas, el empleado podría proponer al jefe nuevas estrategias, segmentos y sectores para abordar.
  3. Generar valor: Hay trabajadores que hacen solamente lo que se les pide, mientras que otros hacen más de lo suficiente para conservar su trabajo: Son motivados, proactivos, piden más trabajo del que se les da, solicitan capacitaciones, conocen muy bien su rubro y saben lo que genera valor a la empresa, para poner ahí el énfasis de su esfuerzo.
  4. Dinamizar: Es valorado un trabajador que genera buen ambiente, dinamiza a su equipo de trabajo, facilita la resolución de los problemas y evita cuellos de botella. Según Bermedo, cuando el equipo que analiza las desvinculaciones, si tiene dos candidatos con igual nivel de productividad y uno de ellos tiene mejores relaciones interpersonales, probablemente se quedará con éste último.
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