Cómo definir las pretensiones de renta adecuadas para un cargo
La pregunta sobre las pretensiones de renta es quizá la parte más incómoda de un proceso de selección, especialmente para quienes están postulando a un trabajo. En la vereda contraria se encuentra la perspectiva del empleador, que no siempre tiene claro cuánto debería pagar para atraer al mejor talento.
En Chile no hay indicios que esta práctica se eliminará en el corto plazo, por lo que quienes buscan empleo deben preparar con cuidado esta respuesta.
Algunos expertos dicen que lo mejor es señalar un monto más alto para luego negociar, mientras que otros aseguran que pedir un sueldo bajo podría mostrar inseguridad respecto a cómo hace su trabajo.
Hugo Álvarez, gerente de negocios de ILC Group, dice que, al ponerse en los zapatos de los reclutadores de las empresas, hay casos y casos.
“En algunos procesos es necesario solicitar lo que la persona desea ganar, porque la respuesta puede ser un predictor para perfilar al profesional e identificar si se trata de alguien que se ajusta las necesidades del puesto y a la cultura de la empresa. Por otro lado, si explicita una cifra muy baja, quiere decir que se trata de un profesional que no valora mucho su trabajo y tiene baja confianza en sí mismo y al revés: si la cifra es muy alta, se trata de alguien con expectativas poco realistas”, explica.
Por ello, Álvarez recomienda a los reclutadores determinar un perfil de puesto y candidato que se requiere y hacer un estudio de los rangos salariales para este. Con ello se amplía el rango de la búsqueda y no se recluta en base a restricción presupuestaria única y se puede considerar distintos perfiles para el cargo.
El profesional también señala que es bueno establecer beneficios extraeconómicos, tales como horarios flexibles, capacitación, tickets de almuerzo, entre otros.
Consejos para el postulante
María Cristina Morales, fundadora de Next Challenge y autora del modelo Profile Canvas, considera lamentable que algunos procesos tengan la renta como primer filtro ya que es una difícil pregunta para el postulante.
“Si nos ponemos desde el lado del candidato, esta resulta una pregunta muy difícil: Si es mucho, pueden quedar fuera de rango; por otro lado las personas creen que si dicen una cifra muy baja el entrevistador va a pensar que no dará la talla del cargo, pues por algo debe estar pidiendo tan poco”, señala.
Según la experta en selección, quienes se enfrentan a esta pregunta deben utilizar rangos en lugar de dar cifras exactas. Normalmente un rango implica un “desde” y un “hasta”.
“Si se quieren dar dos números, la forma correcta de expresarlo sería: “Mi expectativa es $1.000.000 líquido pero, de acuerdo a la propuesta, podría bajar hasta $800.000 líquido como piso mínimo”. En este ejemplo queda claro que el número menor no es negociable”, recalca.
Asimismo, Morales señala que la brecha del rango debe ser razonable, es decir, no debe ser de más de un 40% de diferencia.
Por otro lado, aconseja pensar también en los beneficios como parte del salario. En ese sentido, una persona podría indicar que si bien sus expectativas son de $1.000.000 líquido, ello podría variar en función del marco integral de la propuesta una vez que se cuente con toda la información, a sabiendas de las posibilidades de desarrollo, responsabilidades y condiciones de trabajo.
Desgraciadamente la mejor estrategia de crecimiento es cambiar de trabajo, el reconocimiento interno es lento por las mismas razones que se explican, si ya llevas años haciéndolo bien con un sueldo determinado y en una posición es mas fácil y aconsejable dejar ahí a la persona, es mejor tener un buen barredor conocido que un mal gerente ex barredor desconocido.