El valor de la crítica constructiva y cómo aplicarla con éxito
Saber entregar una crítica constructiva es una característica fundamental de un verdadero líder. Cuando un jefe entrega a sus empleados la identificación de sus puntos fuertes, las áreas de mejora y recomendaciones de una manera empática, los hace sentir valorados y cuida la autoestima del equipo.
Nadie es perfecto y es casi imposible esquivar una crítica en el trabajo. Sin embargo, cuando estas están cargadas con sarcasmo, menosprecio o burla se transforman en una clara señal de que estás ante un mal jefe.
Suyin Palma, directora de responsabilidad social y bienestar de Adecco Chile, define una crítica constructiva como la acción que tiene el propósito de lograr un cambio favorable en las personas involucradas, siempre con una actitud de respeto y sentido de colaboración.
“La crítica constructiva es una retroalimentación que se lleva de una forma positiva. Este refuerzo positivo siempre contribuye al colaborador, al clima y a la productividad”, asegura la experta.
Existe la teoría del método del sándwich para la entrega de una crítica constructiva. Este consiste en comenzar con un cumplido, agregar luego de forma amable lo que debe mejorarse y terminar con otra cualidad.
Este enfoque, aseguran los especialistas, puede ayudar a fomentar un clima de confianza y respeto mutuo, contribuyendo a una relación sana y productiva.
Algunas recomendaciones
Palma explica que hay una serie de puntos para que un jefe pueda abordar una crítica constructiva con éxito. Estos son los pasos a considerar:
- Ofrece un feedback centrado en el objetivo, no en la persona
- Menciona lo que se ha realizado bien, felicita las fortalezas y motiva las buenas prácticas
- Muestra los resultados del desempeño
- Usa un lenguaje formal, pero cercano
- Comparte una historia personal sobre un problema similar y explica cómo lo resolviste
- Asegúrate que la información fue recibida correctamente